En mayo de 1749 fue desterrado a Ceuta un joven italiano, que meses antes había sido detenido tras hacerse pasar por el heredero del ducado de Módena. Su engaño fue descubierto, y por este motivo recluido en una prisión de Sevilla, aunque, por razones pocos entendibles –las crónicas de la época aluden a cuestiones diplomáticas-, gozaba de algunos privilegios.
En su destierro a Ceuta fue enviado al convento de San Francisco, y al igual que ocurriera en la capital hispalense, se le otorgaron ciertas libertades. Las autoridades de la época mantuvieron en secreto su llegada, y de hecho, la escolta desde el puerto hasta el convento fue muy discreta, al objeto de no llamar la atención. Pese a todo, comenzó a circular un rumor en la ciudad: había llegado una persona ligada a la realeza.
El joven mantenía, dentro de los límites que le permitía su situación, un nivel de vida alto. En los documentos firmaba como Hércules de Este Orleans, y se presentaba ante los ciudadanos como hijo primogénito del duque de Módena. Aseguraba estar casado con la princesa heredera, la duquesa de Massa. Comenzó a ganarse el respeto de los ceutíes, que pensaban que realmente se trataba de un miembro de la Casa Ducal de Módena. Su supuesta realeza le abrió muchas puertas, y algunos comerciantes de la ciudad le ofrecían sustanciosos créditos.
Su falsa personalidad fue descubierta en agosto de 1749. ‘La Gaceta’, un rotativo de la época, publicaba una noticia en la que informaba sobre un viaje que el duque de Módena había realizado a la ciudad de Sasuolo acompañado de su hijo primogénito y de las princesas. Estaba claro que no era quien decía ser.
A principios de 1750 corrió el rumor que el falso príncipe pretendía huir. Esta circunstancia provocó que numerosos comerciantes a los que el joven debía dinero, fueran en su búsqueda. En junio de ese mismo año, el falso duque italiano burló la vigilancia de un buque con bandera de Dinamarca, que partió rumbo a Gibraltar, cuyo Gobernador al tener conocimiento de la presencia a bordo del joven, negó su desembarco en el puerto gibraltareño.
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